(ANÁLISIS DE CONTEXTOS)
Responsables
Ma. Luisa García B.
Ana Rosa Moreno P.
INESER, 19 de diciembre de
1997
PRESENTACIÓN DE AVANCES DEL PROYECTO: PLAN DE
ORDENAMIENTO
ECOLÓGICO TERRITORIAL DEL ESTADO DE JALISCO.
1.
INTRODUCCIÓN
El
desarrollo de los trabajos del subsistema productivo es parte importante de una
visión más amplia que guía el proyecto completo de ordenamiento ecológico
territorial del estado de Jalisco (OET J).
De
tal forma que aunque en estos momento estemos presentando avances parciales no
es un proyecto aislado sino el esfuerzo de un grupo interdisciplinario e interinstitucional.
Por
lo tanto, el trabajo de investigación de este subsistema responde a los
términos propuestos en el documento técnico del proyecto general, el que a su
vez, está desarrollado de acuerdo a los términos de referencia proporcionados
por la SEMARNAP .
Según
los documentos mencionados el OE debe entenderse como:
"El
instrumento de la política ambiental cuyo objetivo es inducir y regular el uso
del suelo y las actividades productivas", como base de la política de
desarrollo regional, donde se integren procesos de planeación participativa.
El
enfoque metodológico parte de conceptual izar al estado de Jalisco como un
sistema territorial complejo y abierto, conformado por los subsistemas natural,
social y productivo.
Las
interacciones que se dan entre estos subsistemas están determinadas por las
estructuras
y procesos intra-regionales y extra-regionales.
Se
pretende ordenar e instrumentar dinámicas definidas por procesos de
transformación con distintos niveles de aproximación.
De
esta manera la escala de análisis buscará caracterizar sólo aquellos procesos
primordiales
que expliquen la dinámica territorial específica.
De
esta manera el análisis para el estado de Jalisco debe hacerse desde dos
perspectivas:
1)
El espacio extra-regional, en el cual se distinguen dos fuerzas que están
modificando el espacio regional:
a)
La globalización y
b)
la descentralización del estado.
Para
el análisis del subsistema productivo el proceso de globalización es el marco
extra-regional
que marca pautas y comportamientos regionales.
2)
El espacio intra-regional, donde se evalúan practicas internas que nos permitan
analizar riesgos ambientales y niveles de sustentabilidad.
Para
el subsistema productivo el primero se analiza a través del conocimiento de
los
peligros productivos y el segundo esta por definirse.
1.1
OBJETIVOS
1)
Detectar áreas prioritarias de intervención (en términos de problemas
ambientales y conflictos derivados del sistema productivo). Son áreas donde el
gobierno tiene que invertir recursos para resolver problemas.
2)
Identificar aspectos para potenciar el desarrollo económico regional con
protección ambiental aprovechando oportunidades regionales, nacional e
internacionales.
3)
Evaluar formas de instrumentar políticas integrales para lograr este
desarrollo.
Para
poder llegar a cumplir con los objetivos anteriores es necesario conocer y
analizar
la evolución y tendencias de la estructura económica regional, en un contexto
de economía abierta, en al menos tres dimensiones:
a)
Sectorial (por ramas
productivas)
b)
Localización económica
regional
c)
Impactos ambientales
del sistema productivo.
Abriendo
ventanas de análisis posteriormente donde sea pertinente y posiblemente en
forma temática.
1.2
ORGANIZACIÓN
Para
facilitar el trabajo y poder cumplir con lo propuesto se dividió el trabajo por
subgrupos y grupos especializados en forma temática:
1er.
Subgrupo del sistema productivo
2do.
Subgrupo del sistema productivo
Presentamos
a continuación los avances del grupo de estructura económica sobre el análisis
del contexto.
2.
ESTRUCTURA ECONÓMICA
2.1
Contexto internacional
A
partir de la década de los 70 la estructura económica mundial a cambiado de
forma importante presentando características especiales, que están influyendo,
en diferentes medidas y dimensiones, en todos los países. A este cambio de la
estructura económica a nivel global se le ha llamado, genéricamente,
reestructuración económica, la cual se da dentro de un proceso de
reestructuración más amplio que tiene que ver con cambios tecnológicos,
culturales, sociales, políticos, etc.; es decir, el proceso conocido como globalización.
Las
características especificas del proceso de reestructuración económica a nivel
internacional
puede observase en la identificación de algunos fenómenos que están ocurriendo
en al menos cuatro dimensiones básicas de la realidad: la dimensión sectorial,
la dimensión territorial, la dimensión política administrativa y la dimensión
ambiental.
La
primera de ellas esta relacionada con:
a)
La tendencia a la
terciarización de la economía, la cual a implicado una perdida de importancia
de la actividad manufacturera en relación con la actividad principalmente de
servicios;
b)
El cambio de sectores
importantes y dinámicos tradicionales, por otros que ahora esta relacionados
por ejemplo con la microelectrónica.
La
segunda dimensión tiene que ver con el proceso de desurbanización,
desconcentración o reestructuración industrial, es decir los cambios de la
localización de las actividades industriales que implican el surgimiento de
nuevas áreas de industrialización con nuevas formas de organización y
funcionamiento.
La
tercera dimensión se relaciona con el desmantelamiento del estado benefactor y
por la puesta en marcha o consolidación de políticas de descentralización. Lo
anterior implica una mayor importancia del mercado en la vida económica
cotidiana de los agentes y el aumento de la importancia del papel que juegan
los gobiernos locales en el desarrollo de sus espacios físicos específicos.
Finalmente,
en la cuarta dimensión, los cambios ocurridos básicamente responden al
importante aumento de la conciencia internacional de los problemas ambientales,
marcados principalmente por el gran y rápido deterioro de los recursos
naturales y el impacto de esto en la salud humana y en la localización de las
actividades económicas.
Las
transformaciones que han estado ocurriendo en estas dimensiones en las ultimas
dos décadas, tanto a nivel global (internacional) como a nivel local (países y
regiones) caracterizan el contexto económico contemporáneo.
2.1.1
Reestructuración económica
2.1.1.1
Impactos sectoriales
La
tendencia reciente a la integración internacional difiere de las anteriores
manifestaciones de internacionalización de décadas pasadas en tanto que se caracteriza
por la intensificación de vínculos económicos que trascienden los límites
nacionales ya menudo reflejan un comportamiento estratégico a nivel de la
empresa.
Las
operaciones económicas se desarrollan cada vez más en un ambiente sin
fronteras, en el cual la producción, la tecnología y la comercialización están
vinculadas en cadenas de valor agregado integradas mundialmente". (ONUDI;
1996:2)
Desde
esta perspectiva el contexto económico en el que se han dado los actuales
procesos de reestructuración económica puede ser referido a algunos grandes
cambios de la economía mundial:
1.
La economía de productos primarios se ha desligado de la economía industrial.
Para los países desarrollados el sector productor de bienes primarios ha
llegado a ser marginal en los lugares donde antes jugaba un papel central. El
mundo industrial se ha desarrollado como si no hubiera crisis de materias
primas (Ver Drucker; 1987). En este punto el papel de las empresas
transnacionales explica en gran medida este cambio dado que, en su papel
tradicional, los países en desarrollo debían actuar como proveedores de
materias primas y fuerza de trabajo barata, así como también mercados para sus
productos. Por diversas razones, entre las que destaca el deterioro de los
términos de intercambio de las materias primas en los setenta y la creciente
sustitución de materias primas naturales por sintéticas en los ochenta, el
panorama cambió substancialmente. Ahora las economías en desarrollo, como
América Latina, tienden a ser más marginales de lo que tradicionalmente eran
respecto a las economías industrial izadas. La caída espectacular de los flujos
de inversión directa hacia esas regiones es ilustrativa.
2.
El incremento actual de la producción manufacturera en los países desarrollados
se da con una significativa reducción del empleo generado en el sector, por lo
que los costos laborales son cada vez menos importantes como factor de
competencia (Ibid). Incluso se calcula que sea muy probable que dentro de 20
años países desarrollados como Estados Unidos y Japón ocupen una proporción de
su fuerza de trabajo en la producción de manufacturas que no sea superior a la
que los países desarrollados emplean actualmente en la agricultura (10%).
Asimismo, este cambio hace referencia a la importancia perdida por las
industrias que antes eran intensivas en trabajo, a industrias que desde el
inicio son intensivas en conocimientos. Por ejemplo, los costos manufactureros
de un microchip" recaen 70% en el conocimiento (investigación y
desarrollo) y en no más del 12% en el trabajo; por el contrario, en las plantas
de automóviles más robotizadas el trabajo aún representa el 20 o 25% de los
costos.
3.
Aunado a ello, las manufacturas muestran cambios al revertirse las escalas
utilizadas. El dinamismo de las economías industriales ha pasado de basarse en
las grandes empresas de los últimos treinta años, a basarse en compañías más
pequeñas, profesionalmente administradas (Ibid). Asimismo, destaca el papel de
los acuerdos y alianzas empresariales, fenómeno que si bien no es nuevo, se
está convirtiendo en el principal elemento estratégico para las organizaciones
inmersas en una competencia del ámbito global, donde destacan distintas
modalidades de alianza, tales como fusiones parciales (dados los grandes
fracasos de procesos de concentración vía fusiones totales), las
joint-ventures, la toma de participación cruzada, las agrupaciones de interés
económico y algunos acuerdos de cooperación complejos, donde destacan el
corporate venturing, los acuerdos complementarios y los acuerdos
multilaterales. (Ver Bueno; 1994: 321-336)
4.
Coexisten dos tipos de industria: uno basada en producción física y otro en la
producción de información y conocimiento (telecomunicaciones, instrumentos
analíticos y de procesamiento de información como las computadoras), donde
estas últimas están creciendo rápidamente. Esto último se incluye en lo que se
ha llamado terciarización de la economía".
5.
La estructura económica de los países industrializados ha evolucionado hacia
los servicios a medida que ha disminuido su competitividad internacional en la
industria manufacturera y auspiciado por el desarrollo de las nuevas
tecnologías.
6.
Estos procesos de reestructuración nacional e internacional están apoyados en
una nueva revolución tecnológica con sus consecuencias económicas y sociales.
La base material de la transformación mundial es la llamada tercera revolución
tecnológica" donde coexisten tecnologías "duras"
(microelectrónica, informática, robótica, láser o biotecnología) y "blandas"
, que están modificando radicalmente los procesos de trabajo y condiciones de
organización.
En
la producción industrial estro se ha reflejado en una sustitución del régimen
fordista (línea de producción, producción masiva)a una basado en la conjunción
de computadoras, automatización flexible, redes de información y trabajo en
equipo, lo que ha tenido gran importancia en la conformación de la nueva
división internacional del trabajo" y los procesos de subcontratación
internacional (maquila y fraccionamiento de los procesos productivos,
diversificación de los productos). Su aparición ha generado un nuevo ciclo de
competencia internacional que propicia, en los países, la necesidad de
incorporar la nueva tecnología, donde en caso contrario, se pasa a un nuevo
nivel de subdesarrollo. (Dabat; 1994:136-137)
7.
Los flujos de capital, más que los de comercio (de bienes y servicios) han
llegado a ser la fuerza motriz de la economía mundial. La llamada también
economía "simbólica"-movimientos de capital, tipos de cambio y flujos
de crédito desplaza a la economía "real" producción de bienes y
servicios. El despliegue del capital financiero sin fronteras le ha dado
nuevamente impulso a la inversión extranjera no crediticia. La unificación de
mercados financieros internacionales y nacionales es una de las tendencias
donde la globalización se hace más evidente, proceso que al desarrollarse en un
contexto internacional de constante incremento al riesgo y de la incertidumbre
dio lugar a un proceso continuo de innovación financiera en instrumentos,
mercados y técnicas, todo lo cual no hubiera sido posible sin las nuevas
tecnologías de la informática y las telecomunicaciones, permitiendo perfecta
movilidad.
8.
El comercio mundial en la última década mantiene un ritmo de crecimiento del
doble del producto mundial. La continua aplicación de las nuevas tecnologías a
los procesos productivos, las nuevas formas de organización de la producción y
las posibilidades crecientes de descentralización de dichos procesos, han sido,
entre otros, factores determinantes de los cambios ocurridos en los últimos
veinte años en el comercio internacional. (Gordillo y Talavera; 1996:95) Otro
aspecto que se gestó en décadas anteriores pero se manifestó activamente durante
los años ochenta tiene que ver con la fuerte participación del comercio
intraindustrial e intrafirmas. Ambos se establecen principalmente entre los
países industrializados y se calcula que a mediados de los ochenta la
proporción del comercio intraindustrial correspondiente a los países industrial
izados alcanzó el 60% del total, y para 1990 el comercio intrafirmas representó
el 40% del comercio mundial.
9.
Los anteriores procesos y manifestaciones se hacen tangibles en las nuevas
ramas de punta que a nivel internacional encabezan el llamado nuevo frente
tecnológico, y que son: industria aerospacial, telecomunicaciones, informática,
teleproceso, nuevos conceptos de transporte, microcomputación, automatización,
robótica, biotecnología, energéticos alternativos, restauración del medio
ambiente, explotación del espacio exterior y del lecho marino, superconductores
y conservación de los alimentos. Estas ramas están conformadas por industrias y
servicios de punta. Los servicios dominan en el contenido de los nuevos
productos, además de servicios propiamente dichos. En su conjunto dan paso a
tecnologías cada vez más sofisticadas.
El
contexto que se acaba de señalar ha dado nacimiento a una economía mundial, lo
que implica la existencia simultánea de algunos tipos de relaciones entre los
distintos países mismas que pueden agruparse en tres grandes bloques:
Los
estudios sobre integración económica abordan algunos puntos más, como sería
internacionalización de la tecnología, del factor humano, o transformaciones en
la regulación internacional, por. ejemplo. Sin embargo, en este trabajo
procuramos adaptar dichos enfoques a fin de contar con una perspectiva global
de la integración de la economía mexicana en la economía mundial y sus procesos
de reestructuración dada la información disponible en nuestro país.
EVIDENCIAS DE LAS TRANSFORMACIONES DE LA ECONOMÍA
MUNDIAL
LA INTERNACIONALIZACIÓN FINANCIERA
En
el sector financiero es donde se hacen más evidentes los efectos de la
globalización. Su rápida evolución de las últimas décadas hasta conformar un
sistema financiero global es estudiado por Gordillo y Talavera (1996) quienes
identifican tres grandes etapas que a grandes rasgos son las siguientes:
1)
Un proceso de expansión financiera originado en los setenta ante la formación
del mercado de eurodólares, la mayor regulación del mercado de Estados Unidos
frente al londinense lo cual incentivo a la banca para ofrecer diversos
servicios así como diversos acontecimientos tales como la crisis energética de
1973, la crisis del sistema monetario internacional (1970-1973) y las novedades
de la tecnología de la informática y las telecomunicaciones.
2)
La fase de profundización financiera se puede situar en los ochenta, a partir
de la segunda crisis del petróleo y tras la aplicación de las políticas de
oferta de los Estados Unidos por parte de la administración Regan, mismas que
elevaron las tasas de interés y el precio del dólar en los mercados de divisas,
incrementando el costo de la intermediación financiera y una mayor competencia
por captar los recursos financieros, todo lo cual multiplicó los negocios
financieros y aceleraron el proceso de innovación en este rubro.
3)
Rápidas migraciones del capital financiero. Esta etapa de consolidación situada
en los noventa responde al auge significativo de las inversiones de cartera así
como al rápido crecimiento de la inversión extranjera directa de fines de la
década pasada, que se debieron sobre todo a los procesos de fusiones y alianzas
de empresas.
En
los años ochenta el movimiento de capitales fue fundamentalmente triangulado
entre Estados Unidos, Japón y la Comunidad Económica Europea, sin embargo, a partir
de los noventa ha vuelto a ser importante su participación en algunos países
que por el monto de sus deudas no habían sido considerados sujetos de crédito
ni espacios seguros de inversión, como son los países latinoamericanos. En
estas naciones se logran obtener recursos del mercado internacional de
capitales privados,.además de la inversión extranjera de cartera en acciones,
por las emisiones de acciones por parte de las empresas latinoamericanas en las
bolsas de valores de los países industrializados.
INTERNACIONALIZACIÓN PRODUCTIVA y TRANSFORMACIÓN DE
LOS
Desde
mediados de los setenta se sentaron las bases para transitar a nuevos sistemas
productivos que han sido llamados "neofordistas" o "neotoylorista",
los cuales se fundamentan en las nuevas tecnologías, tales como la
microelectrónica, la informática y las telecomunicaciones. A su vez, estos
cambios tecnológicos han propiciado la aparición de nuevas ramas productivas
dinámicas y nuevas formas de organización de los procesos de trabajo. La
característica básica de estos procesos es la producción flexible que permite
realizar cambios rápidos en la producción de mercancías y una mayor
diferenciación del producto.
Estas
transformaciones productivas propician: una mejora de los niveles de
productividad de los factores; un incremento de los excedentes empresariales
que supuestamente se traducirían en un aumento de los niveles de inversión; una
reconversión industrial con la consolidación de nuevos sectores dinámicos que
incorporan alta tecnología; en un crecimiento acelerado del sector servicios,
vinculado tanto a los nuevos sectores productivos como a la expansión del
sector financiero". (Gordillo y Talavara; 1996:92)
Entre
los cambios de la industria mundial en los últimos años se observa un
crecimiento más lento del valor agregado manufacturero en los países
industrializados. La actividad industrial mundial sigue aumentando, aunque a
ritmo más lento, por ejemplo, la tasa de crecimiento del valor agregado
manufacturero (VAM) pasó de 4.8% en 1994 a 3.8% en 1995. En los países
industrial izados esta tasa de crecimiento bajó de 4.6% en 1994 a 3.4% en 1995.
Dado que estos países aportan más del 75% del VAM mundial su disminución redujo
considerablemente el crecimiento de este indicador a nivel mundial. Los
aspectos coyunturales que inciden en este comportamiento se refieren
principalmente a los aumentos del tipo de interés ya la apreciación de monedas
importantes.
El
dinamismo del cambio tecnológico incide en la competitividad de todos los
sectores productivos, siendo determinante en este cambio la ampliación de la
esfera de influencia de las empresas transnacionales, la concertación de
alianzas estratégicas entre ellas así como la utilización generalizada de las
redes de información y comunicación mundiales. Estas nuevas formas de
organización de la producción imponen una redefinición de las ventajas
comparativas donde la innovación, el carácter global de la organización y de
las estrategias empresariales
tienen
una influencia decisiva. (Ver Gordillo y Talavera; 1996:93-94)
Dentro
de los procesos de internacionalización de la producción la inversión
extranjera ocupa un papel destacado al complementar y/o dirigir la inversión
local, dependiendo de la áreas en que se asiente, de los países y los tipos de
organización de las empresas. La expansión de este tipo de inversión es un
fenómeno bastante palpable no sólo en los países en desarrollo sino también en
los desarrollados. Los siguientes datos ilustran este hecho.
La
inversión extranjera en el mundo se sextuplicó de 1965 a 1983 y de ahí a 1989
creció
en promedio anual 29 por ciento, cifra que supera con creces las de producción
mundial y de exportaciones (Ver Sandoval, 1995). Además, según cifras de la
UNCTAD, la IED en 1991 llegó a los 203 billones de dólares y elevó el stock a
por lo menos l' 613 billones. El dinamismo de las IED se debió entre otras
cosas a la búsqueda por parte de las empresas de mejores condiciones para la
producción y comercialización de sus productos; a las estrategias de alianzas,
fusiones y adquisiciones por parte de las grandes empresas; a la modificación
de las barreras al comercio; a la recuperación de la economía mundial; el
desarrollo de los servicios, en particular las telecomunicaciones que permiten
el control inmediato a distancia a las corporaciones; ya las políticas de
apertura a la inversión extranjera en las economías en desarrollo como
complemento a su escaso ahorro interno.
El
papel de la empresa nacional y transnacional ha sido crucial en las actuales
transformaciones
económicas. Los vínculos entre empresas de países diferentes se han
diversificado y contribuido a la globalización de la producción. "Estos
vínculos incluyen arreglos de subcontratación de largo plazo, inversiones
cruzadas, participaciones minoritarias en acciones, acuerdos sobre franquicias,
etcétera. La importancia cada vez mayor de la IED y los vínculos ajenos a la
participación accionaria entre las empresas en diferentes países implica que la
producción y la distribución se realizan cada vez más dentro de redes mundiales
de empresa" (Agosín;567).
Al
analizar los actuales procesos de inversión debe tomarse en cuenta que una
característica importante de la globalización ha sido la creciente
interrelación entre comercio e inversión, ya que si durante los años sesenta y
setenta el objetivo principal era la producción para los mercados en donde se
asentaba, mientras que la IED más reciente dirigida a la manufactura se ha
centrado en atender a los mercados mundiales más que a los nacionales.
Como
se ha mencionado la IED ha sido clave en el proceso de globalización, lo que ha
logrado a través de las redes conformadas por las empresas multinacionales,
mismas que incrementan de manera notable la interdependencia productiva,
financiera, tecnológica y comercial de la economía mundial. Uno de los efectos
más claros de esa interrelación productiva es el comercio intraindustrial[2]
e intrafirma .
Las
explicaciones a este tipo de comercio se encuentran en la creación de economías
de escala, la diferenciación de productos y la búsqueda de competitividad
aspectos que no eran tomados en cuenta por quienes explicaban el comercio
internacional a la luz de las ventajas comparativas y distintas dotaciones de
factores, mismos que únicamente daban cuenta del comercio interindustrial.
Las
evidencias indican que parte del comercio intraindustrial puede ser intrafirma;
éste se presenta sobre todo en empresas diversificadas horizontalmente, y que
desarrollan diferentes líneas de productos en diversos países, ya sea para
beneficiarse de las economías de escala o para insertarse en los mercados
diferenciando sus productos. Asimismo por el aprovechamiento de los productos
sustitutos en las economías de alcance, de gama o variedad (scope), que
surgen cuando es más barato que una misma empresa produzca conjuntamente varios
tipos de artículos en vez de hacerlo por separado.
En
los países en desarrollo el comercio intrafirma se ha dado en particular por la
fragmentación de la producción mundial, misma que puede atribuirse a los
esfuerzos por lograr competitividad internacional por parte de las
multinacionales mediante economías de escala o el uso de ventajas nacionales
específicas, y por eludir barreras al comercio exterior.
Un
elemento adicional que ha facilitado el camino a un mayor comercio intrafirma
fueron
las políticas de liberalización de la IED en los países en desarrollo,
aplicadas para afrontar la escasez de ahorro interno y la necesidad de divisas
por su alto endeudamiento.
La
internacionalización de los servicios es parte esencial de la globalización
económica. Las industrias de servicios establecen vínculos entre actividades
económicas geográficamente dispersas, por lo que desempeñan un papel clave en
la interdependencia creciente de los mercados y la producción de los países. En
la actualidad los servicios contribuyen, en promedio, con más del 50 por ciento
del PIB y fuerza de trabajo mundiales, e incluso existen países como Estados
Unidos donde alcanza más del 70 por ciento de su fuerza de trabajo. Así mismo,
a medida que el avance tecnológico vaya reduciendo el costo de las
comunicaciones, se prevé que el .comercio de servicios continuará aumentando
con rapidez.
Para
algunos, la terciarización de la economía es un signo de debilitamiento,
deformación y baja productividad del aparato económico, para otros, la
posibilidad de servicios modernos, eficientes y baratos, como requisito
fundamental para el desarrollo y para una mejor inserción en la economía. No
obstante el enfoque que se adóptela expansión de los servicios es una tendencia
insoslayable.
Existe
una estrecha relación entre servicios y tecnología. Al respecto, la
introducción y aplicación de nuevas tecnologías, como la informática, tienen
efectos económicos trascendentales que aún no se perciben en su totalidad. Las
manifestaciones más evidentes parecen ser las siguientes: el cambio radical de
la calidad, la cantidad y la diversidad de los servicios ofrecidos; las
modificaciones de la competencia internacional en el comercio de bienes y
servicios; y la mayor facilidad para internacionalizar una amplia gama de
servicios profesionales, como la arquitectura, la ingeniería y la consultoría
de gestión, mediante el apoyo de técnicas computarizadas para el diseño y la
administración.
La
economía terciaria tiene actualmente una rápida expansión a nivel mundial que
se
da a través de varias formas de exportación de los mismos dependiendo de:
La
TI (tecnología de la información) se considera muy importante para los países
en desarrollo ya que su evolución representa oportunidades y desafíos como
afrontar la creación de un marco normativo apropiado y la realización de las
inversiones necesarias en redes modernas de TI y la adaptación de sistemas
de enseñanza; a su vez el acceso a
servicios eficientes será un factor determinante de creciente importancia de la
productividad económica y la competitividad, lo cual
representa
realizar nuevas exportaciones y atraer más inversión extranjera relacionada con
los servicios. Estas industrias son los principales inversores en TI del mundo.
El gasto en servicios basados en conocimientos, que tienen una elevada
elasticidad-ingreso, está aumentando rápidamente en los países en desarrollo e
industriales.
Mientras
que la terciarización de la economía y de sus intercambios mundiales han ido
creciendo las estadísticas sobre servicios adolecen de muchas deficiencias. De
1980 a 1993, el crecimiento medio anual del intercambio de servicios
comerciales fue del 7.7%y el de mercancías 4.9%. El comercio de "otros
servicios privados", aumentó a un ritmo del 9.5% anual.(Banco Mundial;
1995) Considerando otro indicador, en la década 1978-1987 el valor de los
servicios comerciados equivalía al 24% del de mercancías y para 1995 al
26.3%. El comercio de servicios en
general tiende a ser complementario de la IED (inversión extranjera directa).
Cuando esta última existe, aumentan las transacciones de servicios que se
prestan a distancia (comunicaciones y asesoramiento técnico) y los movimientos
de los suministradores (concesionarios intraempresariales). Desde mediados de
los años ochenta, los flujos de IED han crecido a un ritmo mucho más rápido que
el comercio y el producto mundiales, y el componente d dichos flujos que ha
aumentado con mayor rapidez ha sido precisamente el relacionado con las
industrias de servicios. (Banco Mundial; 1995)
Integración de los Intercambios comerciales. Estructura y Dirección del Comercio Internacional
El
comercio mundial en la última década mantiene un ritmo de crecimiento al doble
del producto mundial, señal inequívoca de la tendencia a la globalización de la
producción.
Alrededor
de los años setenta, después de un periodo de 30 años con crecimiento de los
flujos comerciales de aproximadamente 9% anual, el comercio mundial desaceleró
su avance para situarse en 4% en promedio de 1978 a 19871 con estancamientos a
veces muy severos; entre 1980 y 1983, según datos de la UNCTAD, el comercio se
mantuvo sin crecimiento. A partir de 1988 con una tasa de 8.1% declinó hasta
3.8% en 1993; 1994 y 1995 fueron de altas tasas semejantes a sus mejores años,
9% y 8.7% (FMI, 1996) , que podrían estar vinculadas a las políticas de apertura
comercial y al nuevo marco regulatorio del comercio internacional.
Con
la conclusión de la Ronda Uruguay en donde se define el marco que regula en la
actualidad el comercio internacional y entra en operación la Organización
Mundial de Comercio se prevé que incrementen los intercambios internacionales
de todos los países, ya que además de reducirse las barreras arancelarias ~ rlo
arancelarias, se fortalecerán las normas del comercio multilateral y se
aplicarán a nuevas áreas. El acuerdo debe dar un nuevo impulso al comercio
tanto de manufacturas como de servicios y se espera reduzca las distorsiones
del comercio agropecuario, que afectan sobre todo a los países desarrollados.
La
tendencia a la liberalización e integración comercial ha hecho que los niveles
de comercio exterior se eleven, con cambios en la importancia de los bloques de
países. Si para el periodo 1978-1987 los países industriales tuvieron una tasa
de crecimiento de 4.2% en promedio anual, superior al 3.0% de los países en
desarrollo, a partir de esa década, y hasta 1995, los industriales bajaron su
ritmo a 4.2% y los países en desarrollo subieron a 8.6%. Sin embargo. la base
de donde despegan es muy dispar; en 1987 las exportaciones de países no
industrializados representaban apenas el 33% de las de los desarrollados y para
1995 sólo habían incrementado su proporción a 36%.
Entre
las causas por las que se prevé que los países avanzados disminuirán su
participación en el comercio mundial está la estrategia de penetración a los
mercados por parte de las empresas transnacionales, ya que en muchos casos la
venta desde su país de origen pasa a ser sustituida por flujos de inversiones
directas.
Los
sectores más dinámicos del comercio mundial están constituidos por bienes de
alto contenido tecnológico, sobre todo por bienes de capital. Acorde con el
desarrollo tecnológico de los países industrial izados éstos están perdiendo
competitividad internacional en la industria manufacturera de alta intensidad
de mano de obra poco calificada en favor de los países en desarrollo. Por
ejemplo, de acuerdo con datos de ONUDI (1996) en el decenio pasado, la
participación de estos países en las exportaciones de prendas de vestir a los
países industrializados aumentó notablemente, de 44.7% a 58.7%, convirtiéndose así
en los principales proveedores de prendas de vestir de los países
industrializados, posición que antes tenían los mismos países industrializados.
En
cuanto a la creciente participación de las actividades terciarias en la
economía mundial ,como ya se mencionó, el comercio de servicios representa
actualmente el 26.3% del comercio total, siendo los de mayor crecimiento: las
telecomunicaciones, los seguros, la banca, los servicios al inversionista, los
servicios de construcción e ingeniería y los servicios de consultoría,
publicidad y mercadotecnia.
Por
último, al referirse a la estructura y dirección del comercio mundial también
deben considerarse las tendencias no cuantificables directamente, como lo son
el mayor grado de proteccionismo que prevalece en los países desarrollados
traducido principalmente en un incremento de barreras no arancelarias, así como
en un cierto declive del multilateralismo dada la proliferación de acciones
unilaterales por ciertos países o grupos de países desarrollados.
La
estructura geográfica de las exportaciones e importaciones mexicanas permite
establecer la orientación internacional de nuestra integración comercial. Es
bien difundido el hecho de que la economía mexicana se encuentra muy vinculada
a la economía estadounidense, que por muchos acuerdos que existan, no se ha
logrado diversificar adecuadamente su comercio exterior, tanto en bienes como
en destinos.
Indudablemente
que el comercio exterior de México registra grandes cambios: en 1980 el valor
de los intercambios comerciales totales de México era de 34.85 miles de
millones de dólares(mmd), para 1996 éste fue de 185.47 mmd., representando una
tasa de crecimiento media anual de 11.01%. Si se toma en cuenta que el comercio
mundial creció en el mismo periodo a una tasa de aproximadamente 5.2% el
comportamiento de México es sobresaliente. Sin embargo, este dinamismo no se
refleja en otros indicadores de bienestar como sería el PIB, ya que en ese
lapso creció a una tasa promedio anual de 2%.
En México hay evidencias de que la
exportación de productos modernos innovadores queda en manos de unas cuantas
empresas transnacionales, como comercio intraempresa que se beneficia de las
economías de escala y de alcance a través de la dimensión internacional que
otorga a estas corporaciones
El
comercio internacional asociado a inversión extranjera también se presenta en
México. De acuerdo con Kuri (1994;22) para 1982 este tipo de comercio fue de
sólo 5% aproximadamente, para 1990 este porcentaje se incrementa a 25%. Si los
datos se refieren sólo al comercio con EU el porcentaje se eleva al 30%, como
consecuencia de la política de apertura a la IED.
Al
analizar el comercio intraindustrial Mattar (1993) encuentra que la mayor parte
de esta actividad ocurre en los sectores que producen bienes modernos de
consumo duradero, de capital e intermedio pesados, y que los principales
elementos que determinan el comercio intraindustrial son los sectores de
comercio intraindustrial que tienen mayores tamaños mínimos eficientes de
planta, densidad técnica más alta y relación capital-mano de obra más elevada.
En comparación con los sectores de comercio interindustrial estos estudios confirman
que las economías de escala tienen fuerte presencia en el comercio
intraindustrial, la diferenciación de productos aparentemente tiene poca
significación.
La
alta presencia de transnacionales en el comercio intraindustrial (43 %, según
Ros), explica el comportamiento relativamente estable de las exportaciones y su
tasa más alta y sostenida en comparación con los sectores en donde predomina el
comercio interindustrial.
De
1982 a 1990 el comercio intraindustrial entre México y el resto del mundo creció
considerablemente, de 32 sectores de la CUCI que eran predominantemente
intraindustriales pasaron a ser 86, asimismo para el comercio México- EU de 24
sectores se pasó a 79.
Mattar
encontró que el comercio intraindustrial México-Estados Unidos representó 6.1%
del total en 1982 y aumentó a 35.5% en 1990; las cifras fueron ligeramente
menores con respecto al resto del mundo. Los sectores con un elevado comercio
intraindustrial que tienen un peso considerable en el comercio exterior, casi
siempre tienen déficit comercial.
La
principal forma en que se manifiesta la integración de la producción en los
mercados mundiales es a través de la inversión extranjera, siendo la más
relevante la inversión directa, misma que se caracteriza, de acuerdo con Bueno
(1994:15) por la toma de posición de control en sociedades o por la
constitución o adquisición de sucursales... .
En
mayo de 1989 se publicó el Reglamento de la Ley para Promover la Inversión
Mexicana y Regular la Inversión Extranjera. No afectó el status legal de la Ley
de Inversiones Extranjeras emitida en 1973, pero sí presentó cambios
significativos, como una nueva clasificación de actividades económicas para
propósitos de inversión, incluyendo algunas reservadas a empresarios nacionales
o exclusivamente para el gobierno mexicano.
Las
nuevas disposiciones permitieron la aprobación automática del 100 por ciento de
inversión extranjera en actividades no clasificadas con anterioridad, siempre y
cuando se cumpliera con varios criterios; igualmente, la aprobación automática
de las solicitudes de inversión después de 45 días, la adquisición de más de 49
por ciento de acciones de una compañía, la inversión en maquiladoras y en
compañías industriales y comerciales de exportación, así como en bienes raíces
en zonas restringidas a través de un fideicomiso.
En
México la inversión extranjera viene a complementar a la inversión nacional.
Este papel que ha desempeñado si bien es y ha sido muy cuestionado se ha dado históricamente
en proporciones importantes. Con las recientes reformas a su reglamentación y
la apertura comercial del país el dinamismo de este tipo de inversión ha sido
notable: en 1990 representó el 1.4% del PIB y para 1996 significó 2.7%, es
decir, dicha participación casi se duplicó. Por el contrario la inversión
nacional, medida por la inversión fija bruta, ha aumentado durante el mismo
lapso sólo levemente: en 1990 equivalió a 17.9% del PIB y en 1996 lo hizo en
19.4%.
Comparando
el esquema de México con el mundial se encuentra que las ramas con alta
participación y alto crecimiento a nivel mundial, como son las sustancias
químicas industriales y los productos alimenticios, no presentan comportamiento
similar en México: su participación sí es alta pero tuvieron un bajo
crecimiento en el periodo 1988-1993. Otras ramas con alta participación en la
economía mundial, aunque con bajo crecimiento, son la maquinaria eléctrica y no
eléctrónica y el equipo de transporte. Sin embargo a nivel nacional dichas ramas
tienen baja participación como bajo crecimiento.
La
integración financiera que se está presentando en México se ha dado en el marco
del TLC y de las reformas legales que entraron en vigor en 1995 para alentar la
inversión extranjera. No obstante ser uno de los peores momentos de la banca
mexicana, en junio de ese año Probursa fue el primer banco mexicano en
convertirse en filial de el extranjero Banco Bilbao Vizcaya. Le siguió
Inverlat, cuyo control accionario pasó a manos del banco canadiense Nova
Scotia. Otros de los principales bancos que han tenido recientes
incorporaciones de capital extranjero ha sido Bital I que duplicó la inversión
extranjera aunque sin llegar a convertirse en filial del Banco Central Hispanoamericano
(con participación accionaria del 20%) y del Banco de Comercio de Portugal
(quien adquirió otro 20%); así, Bital continúa como banco mexicano con el
porcentaje máximo de capital extranjero total que permite la ley y que es del
40%. Por su parte Bancomer le vendió e116% de su capital a Bank of Montreal[3]
La
internacionalización de los sistemas financieros, a decir de los expertos
-señala Bueno (1994: 19)- puede preceder, acompañar o suceder a la integración
productiva". Esto se comprende en tanto las empresas industriales
extranjeras pueden o creen poder contar con mejor apoyo en instituciones
financieras de su misma nacionalidad. Asimismo, dadas las estrechas relaciones
económico-financieras que mantienen las empresas que se encuentran en procesos
de integración productiva, a nivel internacional es cada vez mayor la
participación de entidades financieras en empresas industriales, por lo que es
de esperar en México este tipo de relaciones en un corto plazo. Es muy factible
que en el mediano plazo la participación del capital extranjero en el sistema
financiero mexicano se incremente, y que las instituciones crediticias, sobre
todo de mediano tamaño, se fusionen entre sí o busquen un socio foráneo.
2.1.1.2.
Impactos territoriales
Los
impactos territoriales de la reestructuración económica parecerían ser
contradictorios, por un lado encontramos un proceso de desconcentración o
difusión de las actividades económicas, surgiendo nuevos espacios geográficos
industrializados, donde predomina la existencia de grandes empresas multiplanta
en actividades de punta y relacionadas con la existencia de centros de
investigación científica y desarrollo tecnológico (ver. Espacios Geográficos
Industrializados a nivel Mundial). Por otro lado, tenemos aglomeraciones de
pequeñas y medianas empresas que juntas conforman una unidad de producción, es
decir la región entera donde se localizan esta relacionada con la producción de
un tipo de bien, a esto se le a llamado nuevos distritos industriales, éstos
participan activamente en el mercado internacional.
Aunque
parecen ser dos tí pos de organización espacial diferentes ambas están muy
ligadas a dos variables que parecen ser el secreto de su funcionamiento:
1)
Las innovaciones
tecnológicas y
2)
Las redes que se forman
entre las empresas (productores, proveedores, compradores, etc.) para optimizar
su funcionamiento.
Esta
nueva organización territorial, nos plantea una nueva realidad territorial que
esta ligada a lo que algunos estudiosos han llamado urbanización del campo, es
decir, el surgimiento nuevas posibilidades de desarrollo para las áreas rurales
que están ligadas a la posibilidad de atraer inversiones del primer tipo o
basarse en sus capacidades endógenas para generar posibilidades del segundo
tipo. Por otro lado, esta nueva realidad ha transformado la función económica
de las metrópolis convirtiéndolas en el centro o polo de las actividades de la
información, informática, actividades financieras, comerciales especializadas,
etc. .
Por
otro lado, la producción de productos "étnicos" (regionales) o
"hechos a mano", son ahora una oportunidad de desarrollo local,
dentro de la globalización, ya que se pueden tener producciones no masivas y se
pueden construir mercados internacionales para ello.
2.1.1.3.
Aspectos políticos administrativos
(falta
incorporar, análisis de descentralización)
2.1.1.4.
Aspectos ambientales
La
consolidación de los procesos de reestructuración económica coinciden en el tiempo
con el crecimiento de la conciencia internacional sobre la problemática
ambiental, el surgimiento de esta conciencia ambiental internacional esta
ligada a los resultados del Club de Roma en 1972, ya que los resultados
presentados en su documento .'Los limites del crecimiento" ponen en la
agenda política internacional el tema ambiental. Sin embargo, no es hasta 1987
con el informe de la comisión Brundtland "Nuestro futuro común" que
se empiezan a observar avances importantes para tomar en cuenta y buscar
soluciones al problema ambiental, los problemas ambientales y sus impactos no
pueden concebirse de manera aislada, más bien forman parte de un objetivo más
amplio y común logra el "desarrollo sustentable", al que 178 estados
se comprometieron en 1992, en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Medio
Ambiente y Desarrollo (CNUMAD92).
Así,
podemos decir que, desde el comienzo mismo de las tendencias de
reestructuración económica y formación de bloques económicos, las
preocupaciones por el medio ambiente han estado presentes. El argumento de que
el mundo enfrenta dos retos fundamentales: lograr el desarrollo económico y
minimizar el deterioro ambiental, no sólo es aceptado en forma general, sino
que es la principal preocupación de funcionarios gubernamentales, grupos
ecologistas y organismos Internacionales. Sin embargo, las evidencias empíricas
nos muestran que estamos lejos de lograr el objetivo propuesto.
Con
respecto a las consecuencias de las nuevas prácticas económicas sobre el medio
ambiente encontramos que ante las evidencias empíricas hay dos visiones
encontradas, por un lado, los que vislumbran efectos positivos en la relación
entre globalización (reestructuración económica, apertura comercial, etc.) y
deterioro ambiental. Por otro lado, tenemos a los que observan efectos
negativos de esta mismo relación.
Sintetizando
encontramos básicamente tres tipos de efectos:
a)
Efecto escala: si la liberalización comercial y de inversión
causan una expansión de la actividad económica y si la dinámica del resto de
las actividades no cambia, entonces el total del monto de contaminación
generada aumentará. En este contexto, el aumento del comercio internacional por
las nuevas practicas económicas dañan al ambiente en la medida en que aceleran
el ritmo de explotación o utilización de los recursos naturales o insumos
naturales (suelo, bosques, agua, energía, aire, etc.).
b)
Efecto composición: que resulta de los
cambios en las políticas comerciales. Cuando las practicas económicas (como el
comercio) son liberadas, los países tienden a especializarse en el sector en el
cual presentan ventajas competitivas; si éstas se desprenden de la
diferenciación en las regulaciones ambientales, entonces el efecto composición
sería negativo para el medio ambiente, ya que cada país tendería a
especializarse más en las actividades en que sus gobiernos no regularan
estrictamente; es decir, cuando el costo local de abatir la contaminación fuera
relativamente más alto, las empresas cerrarían sus puestas y buscarían una
nueva localización formándose paraísos de contaminación.
c)
Efecto técnico: que es la posibilidad
de utilizar nuevas tecnologías en los procesos productivos. Por un lado, se
observa que la inversión extranjera (IE) transfiere tecnologías modernas más
limpias a las económicas locales en las cuales se instala. Por otro lado, si la
liberalización comercial trae consigo una expansión económica, esto implicaría
un aumento en los niveles de ingreso, y los gobiernos pueden demandar un medio
ambiente más limpio como expresión de una aumento del bienestar nacional. Así,
se tienen evidencias empíricas de que estándares de contaminación más estrictos
y un esfuerzo de las leyes ambientales existentes es una política natural que
responde al crecimiento económico. En este contexto el efecto escala se da solo
en el corto plazo pero los efectos positivos del efecto técnico cambian las
condiciones en el mediano y largo plazo, en estos términos se cuentan con
evidencias teóricas que demuestran que el nivel de contaminación aumenta hasta
que se llega a los 5000 dólares (Grossman y Kruger, 1991 ) o 2500 dólares
(según el Banco Mundial, Globerman, 1993) per cápita de ingreso y luego empieza
a bajar .
La
creciente conciencia ambiental también esta abriendo nuevas posibilidades de
negocios, por un lado encontramos el desarrollo y venta de tecnologías limpias,
donde países como Alemania y Estados Unidos son competitivos. Por otro lado
encontramos la formación de un nuevo mercado que esta creciendo rápidamente y
que es el mercado de productos orgánicos, donde países en desarrollo tienen
posibilidades de participar activamente.
2.2
JALISCO EN EL CONTEXTO NACIONAL E INTERNACIONAL
El
estado de Jalisco se encuentra en la región centro-occidente del país. Su
extensión de 80 137 km2 representa el 4 por ciento de la superficie total de
México. Su territorio se divide en 124 municipios de los cuales los más
importantes por su población y desarrollo económico son Guadalajara, Zapopan,
Tlaquepaque, Tonalá, Puerto Vallarta, Lagos de Moreno, Tepatitlán, Ciudad
Guzmán, Ocotlán y Ameca.
Jalisco
es la cuarta entidad más poblada del país, en 1995 la población del estado
ascendía a 5 991 176 personas -51 por ciento mujeres y 49 por ciento hombres.
Entre 1980 y 1990 la tasa de crecimiento anual fue de 1.9 por ciento, por abajo
de la nacional que fue de 2.1. La edad media de la población es de 19 años. Uno
de cada tres habitantes tiene menos de 15 años y sólo uno de cada 20 tiene 65 o
más.
Jalisco
es el punto articulador de la región occidente, concentra el 56 por ciento de
las unidades económicas de la región y genera el 65 por ciento del empleo,
asimismo constituye una de las regiones más industrializadas del país.
El
tamaño y la distribución geográfica de la población y de las actividades
económicas en el estado son resultado de múltiples factores que han influido en
los procesos y los patrones de crecimiento que ha tenido la entidad, entre los
que se destacan los siguientes:
a)
El surgimiento y consolidación
de una estructura industrial con una fuerte base de pequeñas empresas misma que
ha registrado a lo largo de varias décadas una transformación a medida que se
han instalado en la entidad grandes plantas industriales para satisfacer el
creciente mercado interno y mas recientemente para el mercado internacional.
Para 1993 el 97 por ciento de las unidades económicas en el estado eran
microempresas, las cuales ocupaban el 53.5 por ciento del personal y generaban
el 32 por ciento del ingreso total. Mientras que solo menos del 1 por ciento
eran medianas y grandes, sin embargo ocupaban más de 25 por ciento del personal
y generaban alrededor de 41 por ciento del ingreso total (ver cuadro 2).
b)
El mantenimiento sostenido de Guadalajara
como principal centro de servicios en la región occidente del país lo que ha
obstaculizado el surgimiento de centros de servicios alternos en la entidad con
la capacidad de ofrecer servicios altamente especializados. Guadalajara ha sido
históricamente la ciudad central del occidente de México, según los censos
económicos de 1993 Guadalajara concentraba el 58 por ciento de los
establecimientos económicos manufactureros y el 71 por ciento del personal
ocupado, porcentajes que son igualmente representativos para las actividades terciarias.
c)
La desarticulación de las actividades
agropecuarias que ha evitado la formación de pequeños núcleos de producción
agroindustrial en las distintas regiones del estado capaces de competir en
mercados nacionales o internacionales.
d)
El mantenimiento de flujos migratorios hacia
Estados Unidos que no han permitido cambios importantes en las regiones
expulsaras, para posibilitar su desarrollo. Jalisco ha sido tradicionalmente
uno de los estados mexicanos más importantes por su participación como proveedor
de mano de obra migrante hacia los Estados Unidos; se estima que de esta
entidad proceso entre el 10 y 15 por ciento del flujo total. Jalisco,
Michoacán, Zacatecas y Guanajuato, todos ellos de la región centro occidente
del país, aportan aproximadamente el 50 por ciento de la migración de México
hacia Estados Unidos.
e)
El mejoramiento de las vías de comunicación
terrestre, aérea y de telecomunicaciones que ha permitido por una parte la
consolidación de Guadalajara como centro redistribuidor de comunicaciones en la
entidad y el surgimiento de Puerto Vallarta como un centro especializado en
servicios turísticos con mercado internacional.
Como
resultado de estos procesos se puede decir que existen tres características de
la realidad económica del estado que combinadas con las nuevas tendencias
internacionales pueden servir de base para identificar opciones de desarrollo
para cada una de las distintas regiones del Estado y de la región Ciénega en
particular. Esas tres características son las siguientes:
I.- La formación de aglomeraciones industriales y de
servicios ha permitido al Estado mantenerse en los primeros lugares a nivel
nacional en cuanto a su aportación al Producto Interno Bruto (PIB) del país.
Estas aglomeraciones aprovechan economías que se reflejan en los precios con
los que salen los productos y en la capacidad de capitalización de las
empresas.
Gracias
a lo anterior el PIB participa con cerca del 7 por ciento del total nacional,
ocupando el tercer lugar en importancia en el país. Jalisco es el primer
productor agropecuario de la nación; aporta alrededor 10 por ciento del PIB
nacional del sector y el 11 por ciento del PIB estatal global.
La industria manufacturera jalisciense ocupa un tercer lugar en el país; aporta el 7 por ciento del PIB nacional del sector y el 28 por ciento del PIB estatal global. La base manufacturera se especializa en la producción de bienes de consumo básico (alimentos, bebidas alcohólicas, tabaco y calzado) y en la producción de bienes no tradicionales, como productos de hule, plásticos, metálicos, maquinaria y equipo
electrónico.
La
prestación de servicios ocupa el segundo lugar nacional: el rubro de comercio,
restaurantes y hoteles participa con el 28 por ciento del PIB estatal; los
servicios de transporte, almacenamiento y comunicaciones el 8 por ciento.
II.- Al interior del estado estas aglomeraciones han
constituido espacios especializados tanto a nivel urbano como regional que
tienen mayor capacidad para competir en la economía estatal, nacional e
internacional que los espacios donde no existen este tipo de aglomeraciones.
Este tipo de espacios son conocidos internacional mente como distritos de
negocios especializados que se caracterizan por facilitar el intercambio de
ideas, la capacitación de personal altamente calificado, el intercambio de
insumos, tecnología y servicios, la investigación en nuevas tecnologías,
materiales, diseños, la creación de una imagen favorable para la realización de
negocios y en ultima instancia la creación de una cultura regional identificada
con un tipo de producción, colaboración empresarial y cooperación entre el
sector publico y privado.
En
el caso de Jalisco existen varios distritos de esta naturaleza que a pesar de las
limitaciones económicas, tecnológicas, y de política han logrado penetrar con
fuerza en los mercados nacionales e internacionales. Entre los espacios que se
aproximan a esta idea de distrito de negocios se pueden señalar los siguientes:
a.- La formación de una zona industrial en la Ciudad
de Guadalajara con una fuerte presencia de las agroindustrias y la industrial
metal-mecánica, y una buena articulación entre pequeña y mediana empresa.
b.- La proliferación de talleres de joyería y
platería en el centro y algunos barrios de la ciudad de Guadalajara y
Tlaquepaque que han dado trabajo a una gran cantidad de personas en la entidad
y han sido una fuente importante de ingresos para la entidad.
c.- La consolidación de una aglomeración de negocios
dedicados a la producción, comercialización y exportación de artesanías en
Tlaquepaque y Tonalá que han mantenido activa una buena parte de la economía de
estos municipios.
d.- La consolidación y surgimiento de "zonas
tequileras" en el corredor Guadalajara- Tequila y en la zona de Los Altos
de Jalisco.
e.- El surgimiento de un corredor industrial en El
Salto, importante por sus grandes empresas multinacionales dedicadas a la
producción de productos modernos como los electrónicos.
f.- La creciente importancia que ha ganado la
industria muebl~ra en la ciudad de Ocotlán que ha aprovechado la experiencia de
trabajo manufacturero que se ha beneficiado de la presencia en la región de
empresas transnacionales.
g.- El desarrollo de las actividades turísticas en
Puerto Vallarta que se ha mantenido como uno de los principales destinos en
México para el turismo internacional.
h.- El distrito agroindustrial de Los Altos, en el
cual, se concentra el 30 por ciento del ganado bovino, el 41 por ciento del
porcino, 61 por ciento del ovino y el 56 por ciento de aves.
Estas
experiencias muestran que la aglomeración de empresas que son complementarias
entre si ofrece oportunidades para la promoción del desarrollo económico
regional.
III.- La intervención del gobierno en distintos niveles
ha contribuido directa e indirectamente a la formación de este tipo de
aglomeraciones y al fortalecimiento de algunos sectores y por consiguiente ha
contribuido a determinar la aportación que hace cada una de las regiones de
Jalisco a la economía del estado y del país.
Por
ejemplo gracias a la inversión publica en materia de educación, el estado es el
segundo centro educacional más importante de México. Se ha dado una
concentración de centros educativos de educación superior en la Zona Metropolitana
de Guadalajara y se ha iniciado la diversificación regional de la oferta en
este nivel. El promedio de escolaridad es de 6.5 años de estudio, y cada vez es
mayor la proporción de la población que asiste a cursos de educación media y
superior.
Asimismo
los recursos del estado y su infraestructura constituyen una base sólida para
la manufactura y el comercio internacional. Las obras de infraestructura han
permitido a Guadalajara continuar como el principal centro de negocios en
occidente, en la medida que han fortalecido su ubicación central.
IV.- La apertura económica del país ha puesto mucha
presión a las empresas localizadas en el estado para aumentar su competitividad
en los mercados internacionales. La inversión extranjera y algunos empresarios
locales están participando en los mercados internacionales.
Los
principales impactos regionales de la apertura económica sobre la dinámica
industrial de Jalisco se han manifestado, principalmente, en el surgimiento de
un nuevo tipo de empresas, especialmente manufactureras, que esta conformando
una nueva base económica y especialización de la base económica Jalisciense.
Lo
anterior se puede observar en la disminución de la importancia del mercado
interno y la reorientación de las actividades económicas al mercado
internacional. Indicadores de ello son el acelerado desarrollo de las
maquiladoras de exportación y el comportamiento e importancia de la inversión
extranjera directa. En 1973 se establecieron en Jalisco las dos primeras
empresas maquiladoras y en 1995 existían ya 60, las cuales pertenecen
principalmente a ramas altamente exportadoras como la electrónica, vestido,
cuero y partes automotrices.
En
1993 existían en Jalisco cerca de 224 proyectos de inversión extranjera directa
de los cuales el 50 por ciento eran del sector de bienes manufactureros; dentro
de este mismo sector los subsectores de productos metálicos, maquinaria y
equipo y el fabricación de productos alimenticios, bebidas y tabaco eran los
más importantes.
Sumando
las maquiladoras de exportación, en Jalisco había para 1995 910 empresas
exportadoras; de estas las mas representativas por número de establecimiento
son: artesanías, metal mecánica, maquiladoras, alimentos y bebidas,
automotrices, textiles, calzado y suelas y plásticos y sus manufacturas. En
estos ocho giros se concentra más del 40 por ciento de las empresas
exportadoras.
Así
las exportaciones jaliscienses representaron en 1995 aproximadamente el 8 por
ciento de las exportaciones del país. Estas ventas al extranjero han mostrado
un comportamiento favorable en los años recientes, creciendo 38 por ciento
entre 1993 y 1994, y 30 por ciento entre 1994 y 1995, exportándose en este
último año 3 921.67 millones de dólares. La mayor parte se envía a América del
Norte (63 por ciento), a la Unión Europea envía el 12 por ciento, a Asia el 10
por ciento ya Latinoamérica el 9 por ciento. Los principales sectores
exportadores son: Eléctrico electrónico (50.24 por ciento), Maquiladoras (9.39
por ciento), Películas y Cámaras (7.76), Textil y Confección (4.44 por ciento),
Tequila (2.77 por ciento) y Alimentos y Bebidas (2.48 por ciento).
Un
punto importante a comentar es que aunque en relación al número de
establecimientos la actividad artesanal es la más importante, esto no se
refleja en cuanto al porcentaje exportado, sin embargo la naturaleza de la
actividad nos permite mencionar que muy posiblemente a nivel local los
beneficios de las exportaciones de esta actividad son mayores que los que nos
pueden brindar otras actividades como las maquiladoras que dependen de
factores, insumos y decisiones no locales; además es necesario mencionar que en
los sectores con las exportaciones más importantes, como el de la electrónica,
estas se dan en relaciones intrafirmas. Pero también que las principales
empresas exportadoras son en muchos casos las principales importadoras con
insumos para la producción de los productos exportados.
Este
es el caso de los productos de importación más importantes, tales como,
maquinas y equipo no eléctrico (que participa con el 13 por ciento del total de
importaciones); equipo y aparatos electrónicos (10 por ciento) y aceites y
grasas comestibles (4 por ciento). Lo anterior limita el impacto positivo de las
exportaciones, más aun si consideramos que el dinamismo de estas nuevas
empresas es resultado del apoyo de políticas de apertura económica pero a
golpeado a gran cantidad de empresas pequeñas y medianas jaliscienses, de tal
manera que para el desarrollo de las regiones del estado es importante evaluar
las ventajas que tendría una política que apoye la utilización, desarrollo y
aprovechamiento de recursos locales que puedan se colocados en mercados
internacionales.
En
cuanto a la inversión extranjera directa (IED) existen posiciones contrarías en
cuanto al análisis de los beneficios que este tipo de inversión trae a los
países o regiones menos desarrolladas, por lo que debe de quedar claro que los
flujos de IED en países como México responde a ciclos internacionales de flujos
altos y bajos más que a la promoción nacional de la misma y que para poder
aprovechar a lo máximo los beneficios y minimizar los costos de la IED es
importante:
a)
No solo abrir las
puestas a este tipo de inversión sino que es necesario evaluar los costos y
beneficios, ya partir de este balance plantear las estrategias adecuadas de
regulación y promoción de la inversión extranjera;
b)
Es necesario saber que México en general y
aun más Jalisco en particular son, dentro del tablero mundial de flujos de
capital, una pequeñísima posibilidad para la inversión, y que esto nos obliga a
establecer un programa de promoción de la IED específico, competitivo, realista
y flexible.
En
términos generales se puede decir que en Jalisco la IED no ha tenido los
comportamientos ideales que se han buscado a través de su promoción, basta
mencionar el fracaso de los parques industriales, los cuales presentan una
subutilización importante en cuanto sus expectativas, capacidades e inversión
realizada. Además, de algunas características específicas del comportamiento de
la IED en el estado de Jalisco:
a)
La IED ha disminuido con respecto al nivel nacional (ver gráfica 3). Lo que nos
indica
que se deben readecuar los programas de promoción de la IED, ya que otros estados
están compitiendo activamente por la inversión.
b)
la IED trae consigo un beneficio concentrado a nivel espacial y sectorial lo
que obliga a que:
1)
se regule en este
sentido la inversión extranjera, lo cual bajaría aun más las posibilidades de atraer
inversión y/o
2)
se piense en un desarrollo no basado en la
IED en el resto del estado y los sectores no beneficiados. Aproximadamente el
92 por ciento de la IED en Jalisco esta ubicada en la zona metropolitana de
Guadalajara y su zona conurbada; la cual se concentra en los sectores
industrial (34 por ciento), servicios (33 por ciento) y comercio (24 por
ciento).
Estas
cuatro características son el contexto de referencia para el presente plan de
desarrollo de la región Ciénega. En torno a ellas es posible Identificar que
oportunidades y obstáculos existen en la región Ciénega para promover su
desarrollo y contribuir al desarrollo general de la entidad.
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Zaragoza,
José. El papel de los servicios en la reestructuración industrial" en
Problemas del desarrollo, UNAM. octubre-diciembre de 1993.
[1]
A
partir de este punto y hasta el apartado Integración de los intercambios
comerciales: Estructura y dirección del comercio internacional" se basan
en gran parte en el trabajo -Alcances y límites de la reestructuración
económica en Jalisco, 1980.-19-95, varios autores, INESER, U de G, 1997, sin
editar.
[2] El comercio intraindustrial es aquel en el que de manera simultánea se exportan e importan bienes de un mismo tipo de industria. Los productos pueden ser tanto insumos, como bienes de capital o de consumo.
[3]
Datos
de la revista EXPANSIÓN, junio de 1996, p.20