Infraestructura
La dotación de
infraestructura en las sociedades en desarrollo es una premisa fundamental para
alcanzar un nivel adecuado de bienestar social y económico. Sin embargo,
también se tiene conciencia de que en el proceso de dotación de ésta y en su
operación se generan impactos negativos al medio ambiente y a la salud de la
población.
Esta infraestructura
consiste principalmente en dotación de energía e instalaciones para los
procesos productivos; en servicios básicos de agua potable, alcantarillado,
drenaje y energía eléctrica, infraestructura de saneamiento, de comunicaciones,
de educación, de salud y, de atención en caso de eventualidades adversas como
desastres naturales o antrópicos para los asentamientos humanos.
Tanto en los diversos foros
internacionales como en los programas sectoriales del país, se ha puesto mayor
énfasis en la dotación de servicios básicos a la población, los cuales son
primordiales para un desarrollo urbano sustentable.
Así,
se identifican como prioridades del desarrollo urbano nacional la dotación de
servicios básicos como agua potable, alcantarillado y tratamiento de aguas
residuales, recolección, tratamiento y disposición de residuos sólidos, así
como la vialidad y el transporte en las ciudades, los cuales presentan rezagos
importantes que impactan tanto en la calidad de vida de la población como en la
conservación del medio ambiente.
El
agua potable, el alcantarillado y el saneamiento básico, son los satisfactores
más demandados por la población en las ciudades. A los problemas de
insuficiencia en la cobertura de estos servicios se suma la falta de una
cultura que incentive el ahorro del agua. Entre las metas que se han
fijado en el Programa Hidráulico 1995-2000 está alcanzar niveles de cobertura
en los servicios de agua potable, alcantarillado y saneamiento del agua, para
lo cual ha identificado como ámbitos de acción a las localidades rurales con
menos de 2500 habitantes, a las localidades urbanas con más de 2500 habitantes,
y a las comunidades localizadas en cuencas hidrológicas prioritarias.
Respecto
a los residuos sólidos, en la mayoría de las ciudades mexicanas la capacidad
de recolección y disposición adecuada de los residuos sólidos es limitada. Por
lo tanto, resulta prioritario abatir la insuficiencia y la obsolescencia de los
equipos de recolección y transporte de residuos, y mejorar los recursos para el
mantenimiento de unidades y equipos.
Por otro lado, se tiene
conciencia de que la infraestructura existente en México para el manejo de
residuos peligrosos es muy limitada e insuficiente para procesar los ocho
millones de toneladas que se generan cada año. De esta cantidad, se estima que
sólo el 12% de los residuos peligrosos generados en México se controlan
adecuadamente. De la misma forma, tan sólo el 20% de los residuos industriales
recibe tratamiento.
En lo referente al
transporte y la vialidad, se reconoce la ineficiencia del transporte público y
la insuficiencia de las estructuras viales, debidas principalmente a la
expansión de las ciudades, al considerable aumento del número de vehículos y
por la excesiva concentración de actividades humanas. A nivel estatal, se
reconoce que la insuficiencia en la red de comunicaciones terrestre ha
contribuido a acrecentar las desigualdades regionales, contrastando los grandes
centros urbanos del centro del estado con las zonas del norte y del sur, en las
que además el mantenimiento de la infraestructura existente es nulo.
En cuanto al sector
energético petrolero, se prevén acciones para mejorar la protección al ambiente,
a través de la prevención, control y mitigación de los impactos asociados a la
construcción y operación de las instalaciones. Así mismo, se contempla la
mejora de la infraestructura necesaria, y la construcción y rehabilitación de
instalaciones para tratamiento de efluentes y de desechos sólidos, líquidos y
gaseosos, así como para el tratamiento de descargas residuales.
Los planes en el sector
eléctrico tienen contemplado reforzar la prevención y mitigación del impacto
ambiental de las instalaciones eléctricas, incorporando las acciones de
protección ambiental en las etapas de planeación y selección de sitios,
enfatizando la evaluación de los costos y beneficios de alternativas de
ubicación de estas instalaciones.
Con respecto al Programa
Hidroagrícola, éste plantea: inducir patrones de utilización del agua más
eficientes en riego; la ejecución de obras de irrigación y drenaje para
incorporar nuevas superficies de riego; rehabilitar y modernizar la
infraestructura para el riego; promover el uso eficiente de ésta en las
regiones en donde se encuentre subutilizada; y la realización de proyectos de
control de ríos para la protección de áreas productivas entre las que se
incluyen obras de defensa contra inundaciones.
Para la infraestructura
educativa, el Programa de Desarrollo Educativo 1995-2000 plantea que la
consolidación del federalismo educativo debe comprender lo relativo a la
edificación, mantenimiento y equipamiento de los espacios escolares, por lo que
los esfuerzos deben enfocarse a reducir los rezagos y adecuarse a las
características y necesidades locales. Por ello, las autoridades de los estados
y municipios tendrán que asumir gradualmente la plena responsabilidad de la
infraestructura y equipamiento escolar en sus correspondientes ámbitos territoriales.
En lo referente a la
infraestructura para la salud, el Programa de Reforma del Sector Salud reconoce
la deficiencia en la cobertura de los servicios de salud, especialmente en las
poblaciones rurales.
Por su parte, en el
Programa de Protección Civil 1995-2000 se plantean como metas: equipar y
consolidar la operación del Centro Nacional de Operaciones, actualizar el
Inventario Nacional de Recursos Humanos y Materiales para la Atención de
Emergencias y el Atlas de Riesgos, promover en todos los niveles de gobierno la
incorporación de recursos humanos suficientes y calificados a las unidades de
protección civil, crear, organizar y equipar un grupo de trabajo que desarrolle
tareas de evaluación preliminar y, promover el equipamiento de las unidades de
protección civil, así como de los cuerpos de auxilio.